Después del veto, el Gobierno asegura que "tomar una Universidad es delito"
El Gobierno rechazó las protestas estudiantiles tras el veto a la ley de Financiamiento Universitario, enfatizando que la ocupación de universidades es un delito.
El Gobierno criticó la reacción estudiantil ante el veto a la ley de Financiamiento Universitario, advirtiendo que "tomar una universidad es un delito". Durante una conferencia de prensa, el vocero presidencial, Manuel Adorni, expresó su apoyo a "la mayoría de los estudiantes, docentes y no docentes" que desean que la institución educativa esté "funcionando".
Adorni subrayó que "tomar una universidad es tan ilegal como ocupar cualquier edificio" y señaló que el espacio adecuado para discutir los fondos universitarios es el Presupuesto 2025. En su intervención, reiteró su "solidaridad" con aquellos estudiantes que buscan investigar y estudiar, así como con los docentes y personal no docente que desean que la universidad opere normalmente.
Además, indicó que corresponde a la Justicia decidir si se procede con los desalojos de los edificios ocupados por estudiantes y personal. También acusó a la "vieja política" de intentar provocar un regreso al caos, afirmando que la ley de Financiamiento Universitario comprometía el equilibrio fiscal, y dirigió críticas hacia los gremios docentes y no docentes que exigen mejoras salariales.
"Pese a la negativa de los gremios, el Gobierno otorgará el 6,8% al personal docente y no docente para el mes de octubre. Es decir, prefirieron rechazar el aumento y habilitar la toma antes que aceptar el aumento y seguir trabajando para mejorar la situación", anunció.
Además, sostuvo que "es la misma vieja política que se niega a auditar las universidades", al remarcar que "el 89% de los fondos transferidos entre 2015 y 2022 no fueron rendidos", indicó.