Día del Guardaparque: el esfuerzo y la dedicación para cuidar la flora y fauna en San Juan
En San Juan hay 85 empleados que cumplen funciones como agentes de conservación y que están distribuidos en las diferentes áreas protegidas y también dentro del cuerpo de inspectores de fauna.
El 9 de octubre de 1934 se sancionó la Ley N° 12.103, que dio origen a la ex Dirección de Parques Nacionales y a la formación del Cuerpo de Guardaparques en Argentina. Con el objetivo de proteger la biodiversidad, las bellezas escénicas y los fenómenos geomorfológicos del país, esta ley sentó las bases para la custodia del patrimonio natural y cultural. En San Juan, alrededor de 85 guardaparques se dedican a salvaguardar la flora y fauna locales.
Ezequiel Salomón, director de Conservación de San Juan, compartió detalles sobre el trabajo que realizan en las 16 áreas protegidas de la provincia. "Contamos con un cuerpo de agentes de conservación que se desempeñan en cada área, custodiando los recursos naturales y culturales. Ellos realizan tareas de vigilancia, control y monitoreo, además de interactuar con las comunidades locales para mejorar la calidad de vida y mantener el ecosistema", explicó.
El Parque Provincial Presidente Sarmiento, un humedal a solo 20 kilómetros de la ciudad de San Juan, es un ejemplo de las áreas habilitadas para el uso público y educativo. Este parque, especialmente en octubre, mes de las aves, recibe visitas escolares y turistas que pueden disfrutar del avistaje de fauna, en un entorno que ofrece refugio y zonas de nidificación para estos animales.
Otro sitio destacado es Loma de las Tapias, un paisaje protegido que resguarda su belleza escénica y formaciones geológicas. Las áreas más alejadas de la ciudad, como el paisaje protegido de Pedernal y La Ciénaga, también cuentan con senderos señalizados y guías que brindan información sobre la importancia de los ecosistemas locales.
El trabajo de un guardaparque implica un esfuerzo considerable. Según Salomón, "cumplen guardias de siete días, dedicándose por completo a la custodia del área protegida, realizando tareas de vigilancia y control de caza furtiva, y respondiendo a denuncias de la comunidad". En caso de detectar actividades ilegales, los agentes proceden a labrar actas de infracción y decomisar los elementos asociados al ilícito, asegurando la rehabilitación de la fauna rescatada.
La labor de los guardaparques sanjuaninos no solo se centra en la vigilancia y protección, sino también en el rescate de fauna silvestre. Salomón señaló que "cuando recibimos denuncias de animales heridos, como guanacos o gavilanes, formamos equipos técnicos para brindar atención inicial y trasladarlos a centros de rehabilitación".
La dedicación y compromiso de los guardaparques son esenciales para la conservación de los recursos naturales y la educación ambiental en San Juan, reflejando la importancia de preservar la riqueza natural de la provincia para las futuras generaciones.
