Burnout: Cómo identificar los signos de alerta y llegar a fin de año más calmado
El psicólogo Pablo Celani, analiza las señales de alarma y cómo reconocer este problema.
A medida que nos acercamos al último trimestre del año, el síndrome de burnout, o del "quemado", se vuelve una preocupación creciente entre quienes enfrentan altos niveles de estrés laboral. Este síndrome, que combina síntomas depresivos y ansiosos, afecta particularmente a aquellos con largas jornadas de trabajo, bajo reconocimiento económico y a quienes interactúan frecuentemente con el público. Pablo Celani, psicólogo, analiza en una entrevista con Zonda Diario las señales de alarma del burnout y ofrece consejos para enfrentar esta última etapa del año de manera más equilibrada.
¿Qué es el burnout y cómo reconocerlo?
El burnout es un síndrome depresivo-ansioso que surge en contextos laborales de alta presión y estrés prolongado. Según Celani, este estado afecta especialmente a profesionales como docentes, médicos y aquellos que trabajan en atención al cliente, donde la carga emocional es constante. "Muchas veces lo escuchamos en personas que dicen: "yo atiendo al público", o en secretarias, donde el sonido del teléfono, la clínica y el estrés del entorno elevan los niveles de cortisol", explica el psicólogo.
El cortisol, la hormona del estrés, es clave para mantenernos alerta en situaciones de tensión. Sin embargo, cuando los niveles de cortisol se mantienen elevados por largos periodos, el cuerpo y la mente comienzan a desgastarse. "Nuestro sistema nervioso autónomo empieza a fallar. Las funciones como el sueño, la concentración y el estado anímico se ven afectadas", señala Celani. Entre los primeros signos del burnout, menciona el agotamiento mental, pensamientos pesimistas y una sensación de estancamiento.
Un síntoma más grave, agrega, es la despersonalización. "Es como si la persona se desconectara de la realidad; un día estás manejando hacia el trabajo y de repente no sabes cómo llegaste allí", comenta Celani, destacando la importancia de reconocer estas señales tempranas para evitar un deterioro mayor.
El impacto del contexto en el burnout
En Argentina, los últimos cambios políticos y las medidas económicas han contribuido al aumento del estrés laboral. Celani ha notado un incremento de casos de burnout en su consultorio, especialmente en pacientes que trabajan en el sector educativo y sanitario. "El índice más alto lo veo en docentes y médicos, quienes lidian con las consecuencias de las demandas crecientes en su trabajo diario", afirma.
Consejos para enfrentar el último tramo del año
Con la llegada de diciembre y las festividades, Celani reconoce que es un desafío llegar a esa fecha de manera equilibrada, especialmente para quienes desempeñan trabajos altamente estresantes. Sin embargo, subraya la importancia de no ignorar los síntomas. "Si ya estás experimentando insomnio, despersonalización o cualquier otro signo de alarma, es crucial prestar atención a esos síntomas y buscar ayuda", advierte.
El psicólogo enfatiza la necesidad de cuidar la salud mental, incluso cuando el tiempo parece escaso. "Es fundamental encontrar espacios para distenderse: ir al gimnasio, salir a caminar o simplemente tomar un descanso. Cuidar nuestra salud mental es una responsabilidad que no debemos dejar al azar", aconseja.
Para Celani, la idea de que estar bien o ser feliz es algo que ocurre naturalmente es errónea. "La felicidad y el bienestar requieren atención y esfuerzo. Si perdés contacto con lo que te hace bien—sea la naturaleza, la música, el arte o las relaciones cercanas—eventualmente vas a sentir el impacto", concluye.
En este sentido, recalca la importancia de equilibrarla vida laboral con otros aspectos que brinden satisfacción personal. "Si todo tu bienestar depende del trabajo y este falla o te encontrás en un estado de agotamiento, se te viene el mundo abajo", advierte.
