Mercado inmobiliario argentino: Desafíos y oportunidades en tiempos de incertidumbre
A pesar de los constantes vaivenes económicos y la falta de financiamiento hipotecario, el sector inmobiliario argentino muestra señales de mejoras. El CEO de RE/MAX, Sebastián Sosa, analizó las oportunidades y retos que enfrenta el mercado en un contexto de recuperación.
El mercado inmobiliario en Argentina ha sido testigo de altibajos notables, reflejando las complejidades de la economía del país y su impacto en la capacidad de los ciudadanos para acceder a una vivienda. Recientemente, Sebastián Sosa, CEO de RE/MAX, una de las firmas inmobiliarias más reconocidas a nivel mundial, visitó la provincia de San Juan en el marco de un encuentro regional de brókers. Este evento no solo sirvió para capacitar y formar a los asesores inmobiliarios de la región, sino que también brindó la oportunidad de analizar en profundidad el estado actual del mercado inmobiliario argentino y sus perspectivas futuras.
La paradoja del mercado inmobiliario argentino
Sosa describió a Argentina como un país "atípico" en el contexto global, destacando una paradoja que define gran parte del mercado inmobiliario local: mientras en muchos países del mundo la compra de una casa se financia a través de créditos hipotecarios a largo plazo, en Argentina, debido a la inestabilidad económica, es común que las propiedades se paguen en efectivo, mientras que las compras diarias se realizan en cuotas. "Uno va al supermercado y puede comprar el changuito de compras en 24 cuotas y la casa en efectivo. En el mundo ocurre al revés, la casa la compro en cuotas y el changuito en efectivo", señaló Sosa.
Esta situación refleja la enorme dificultad que enfrenta la clase media argentina para acceder a una vivienda propia. A diferencia de países como Chile, Uruguay o Brasil, donde los ciudadanos con un ingreso medio pueden acceder a créditos hipotecarios, en Argentina este tipo de financiamiento es prácticamente inexistente. Sosa señaló que el financiamiento hipotecario en Argentina representa apenas un 0,5% del Producto Bruto Interno (PBI), una cifra alarmantemente baja en comparación con otros países de la región, donde este porcentaje puede alcanzar el 30%.
La "primavera" del mercado inmobiliario durante el gobierno de Macri
Haciendo un repaso histórico, Sosa recordó que durante el gobierno de Mauricio Macri, el mercado inmobiliario experimentó una breve "primavera" impulsada por la introducción de los créditos UVA (Unidad de Valor Adquisitivo). Estos préstamos, ajustados por inflación, permitieron que muchos argentinos accedieran a la vivienda propia, especialmente en la Ciudad de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires. Sin embargo, el impacto en el interior del país fue mucho menor, siendo casi nulo.
"En el gobierno de Macri hubo una suerte de primavera, bonanza, aparecieron los préstamos UVA. Eso impactó principalmente en la Ciudad de Buenos Aires, en la provincia de Buenos Aires, y bastante menos en el resto del país. Pero fue un boom, por así decirlo", comentó Sosa. No obstante, esta bonanza fue muy corta. En 2018, la crisis económica que afectó a Argentina, combinada con la inestabilidad política y la pandemia de COVID-19, resultó en un desplome del mercado inmobiliario, especialmente en la Ciudad de Buenos Aires, que había sido la más beneficiada por los créditos UVA.
El impacto de la crisis: un mercado en caída
El desplome del mercado inmobiliario argentino se sintió de manera desigual en todo el país. La Ciudad de Buenos Aires, que había experimentado un auge significativo durante la "primavera" de los créditos UVA, fue la más afectada por la crisis, mientras que la provincia de Buenos Aires también sufrió un impacto considerable, aunque menor. En el interior del país, donde el boom inmobiliario nunca alcanzó la misma magnitud, la caída fue menos pronunciada, pero igualmente significativa.
"Del 2018, que se cortan los préstamos, pandemia de por medio, el mercado inmobiliario se desplomó. Especialmente la Ciudad de Buenos Aires lo sintió mucho más también que la provincia y el interior de la Argentina, porque Buenos Aires venía como surfeando una ola fuerte", explicó Sosa. La falta de financiamiento hipotecario, combinada con la incertidumbre económica y la devaluación del peso, creó un escenario en el que el mercado inmobiliario se mantuvo en caída durante varios años. Cosa que se evidenció en su mayor expresión al final del mandato de Alberto Fernández.
Señales de recuperación: ¿El viento ha cambiado?
A pesar de este panorama desalentador, Sosa ve señales de una posible recuperación en el horizonte. Aunque los créditos hipotecarios aún no se han materializado a gran escala, el interés por parte de los bancos está en aumento. "Se está hablando de préstamos hipotecarios, algo que todavía no se está materializando, pero ya va a terminar ocurriendo, es una cuestión de tiempo", afirmó Sosa. Según él, los bancos, que antes hacían negocio prestando al Estado, ahora necesitan prestar a los ciudadanos, lo que eventualmente podría llevar a una reactivación del financiamiento hipotecario.
Además, Sosa observó un cambio en la tendencia de los precios de las propiedades, que han dejado de caer y comienzan a mostrar signos de estabilización. "Los valores han venido en caída, si uno lo compara de repente a octubre, septiembre del año pasado, a lo que fue el año 2019… Hoy hay una tendencia, por lo menos se tocó fondo", comentó Sosa. Aunque los precios no están disparándose, la estabilización de los valores y el aumento moderado de la demanda podrían ser indicios de un cambio en el mercado.
La visión de futuro, según Sosa
Sebastián Sosa también habló sobre los desafíos y oportunidades que enfrenta el mercado inmobiliario en Argentina. En su opinión, la oferta de propiedades se está reduciendo mientras que la demanda comienza a crecer, aunque de manera gradual. Este ajuste en la oferta y la demanda, junto con una leve estabilización económica, podría llevar a una reactivación gradual del mercado.
Sosa también destacó la importancia de dejar que el mercado funcione libremente, sin tantas regulaciones que limiten su crecimiento. "Yo creo que el mercado funciona mejor cuando se lo deja libre y la oferta y la demanda encuentran como que su ubicación", señaló. Este enfoque, según él, podría permitir que el mercado inmobiliario argentino recupere parte del dinamismo que perdió en los últimos años.
En cuanto al futuro, Sosa se muestra optimista sobre las perspectivas del mercado inmobiliario en Argentina, especialmente si se logran implementar políticas que faciliten el acceso al financiamiento y se promueva un entorno más favorable para los negocios. "La Argentina es un país maravilloso porque, o sea, estamos andando con un cilindro y funcionamos… Yo siempre digo, no necesitamos ayuda, necesitamos que nos dejen hacer. El argentino tiene un talento increíble, maravilloso", concluyó Sosa.
RE/MAX en Argentina: Una marca que empodera al emprendedor
RE/MAX ha logrado consolidarse en Argentina como un referente en el mercado inmobiliario, y su expansión a lo largo y ancho del país es prueba de ello. Durante su visita a San Juan, Sosa subrayó que la clave del éxito de RE/MAX radica en su capacidad para empoderar a emprendedores, corredores y martilleros mediante una combinación de marca, tecnología y formación continua. "RE/MAX viene, de alguna manera, a proveerle a aquel emprendedor, a aquel corredor y martillero que quiera, le da marca, le da herramientas tecnológicas, le da capacitación, le da encuentros como el de hoy, donde básicamente también te abre el mundo", explicó Sosa.
Este enfoque ha permitido que RE/MAX se convierta en un socio estratégico para muchos profesionales inmobiliarios en Argentina, ofreciéndoles no solo un nombre reconocido, sino también un soporte integral que incluye desde herramientas tecnológicas hasta oportunidades de networking a nivel internacional. Sosa destacó que este modelo ha sido particularmente exitoso en regiones como San Juan, donde la empresa cuenta con una sucursal en el departamento de Santa Lucía.
