Steel Framing amenaza con jubilar la construcción tradicional

La construcción en seco, específicamente a través del sistema conocido como Steel Framing, está ganando terreno en el ámbito de la edificación en Argentina. Este método innovador, que sustituye el tradicional uso de la cuchara, el balde y el ladrillo, permite reducir costos de materiales y mano de obra, además de acortar significativamente los tiempos de construcción.
El Steel Framing es un sistema constructivo que se basa en un entramado de perfiles de acero galvanizado, fabricados a partir de bobinas producidas en el país. Estos perfiles son la estructura básica de la edificación, la cual se complementa con otros elementos prefabricados como paneles, ladrillos celulares, ladrillos de plástico reciclado, y chapas. La principal ventaja de este método radica en que no requiere el uso de mezclas húmedas, y la construcción se realiza con anclajes mecánicos o químicos, lo que permite concretar proyectos en plazos mucho más cortos que los métodos tradicionales.
Actualmente, se estiman más de 12.000 obras en ejecución utilizando este sistema, abarcando desde viviendas hasta inmuebles comerciales e industriales. Además, este tipo de construcción se alinea con tecnologías sostenibles, integrando paneles solares y sistemas de calefacción y refrigeración por geotermia. Estos avances apuntan a una mayor independencia de las redes tradicionales de servicios, promoviendo edificaciones más autosuficientes y amigables con el medio ambiente.
El Steel Framing permite un ahorro de hasta el 60% en energía destinada a calefacción y aire acondicionado. Además, el acero utilizado es 100% reciclable, y su huella de carbono es un 47% menor que la de la construcción húmeda. Otra ventaja es que no requiere consumo de agua durante la obra y reduce la necesidad de fletes, debido al menor peso de los materiales.
Un aspecto destacado del Steel Framing es su flexibilidad en diseño y aplicación, lo que lo convierte en una opción viable para una amplia variedad de proyectos. Según Francisco Pedrazzi, presidente del Instituto de la Construcción en Seco (INCOSE), "el sistema se adapta a una gran variedad de proyectos y está generando una gran demanda, ya que ofrece diferentes ventajas que la posicionan como una propuesta superior a la construcción húmeda".
Desde el punto de vista económico, el Steel Framing ofrece un valor por metro cuadrado inferior al de la construcción tradicional. En el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), una construcción de este tipo, con calidad de terminación media alta, oscila entre los u$s 700/m² y u$s 800/m², mientras que el costo en una edificación tradicional es entre un 5% y 8% más alto. Además, el tiempo de obra se reduce en un 65%, lo que implica menos costos indirectos y una menor necesidad de mano de obra.
A pesar de estos beneficios, todavía existen prejuicios en relación con el uso de Steel Framing, especialmente en Argentina, donde la construcción con ladrillos se asocia a mayor seguridad y durabilidad. No obstante, Pedrazzi asegura que "las estructuras de Steel Framing, ejecutadas en acero galvanizado, tienen una durabilidad estimada en 300 años, y todos los productos que conforman el sistema están certificados bajo normas de calidad".
En términos de sustentabilidad, el Steel Framing se destaca por su menor impacto ambiental y su contribución a la eficiencia energética. Además, al reducir los tiempos de ejecución, se genera un ahorro significativo en costos, y se minimizan los desperdicios de materiales, lo que reduce la necesidad de fletes y volquetes.
En conclusión, la construcción en seco, con su enfoque en la eficiencia, sostenibilidad y reducción de costos, está posicionándose como una alternativa viable y atractiva frente a los métodos tradicionales. Con una demanda en aumento y la capacidad de adaptarse a diversos proyectos, el Steel Framing podría ser el futuro de la construcción en Argentina.