"Me cuesta mucho entender porque hay sectores que se oponen al RIGI"
Según el ingeniero Andrés Castro, el RIGI representa una oportunidad histórica para San Juan, facilitando las condiciones necesarias para atraer inversiones y convertir a la provincia en un referente del sector minero.
El ingeniero Andrés Castro, presidente de la Comisión de Minería de la Legislatura de San Juan, expresó su incomprensión ante la oposición de algunos sectores políticos a la adhesión al Régimen de Incentivos a Grandes Inversiones (RIGI). Según Castro, este régimen trasciende las divisiones políticas y es fundamental para el desarrollo económico de la provincia. Sus conceptos fueron directos hacia la posición de gran parte del justicialismo en la Cámara de Diputados, que se manifestaron en contra del Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones.
Un momento crucial para la economía de San Juan
"Estamos en un momento bisagra en la economía de nuestra provincia", señaló Castro. "La aprobación de este régimen puede significar el desembarco de grandes inversiones. Aunque el RIGI beneficia a un amplio sector de industrias, no podemos ignorar el impulso que podría dar a los proyectos mineros de clase mundial que tenemos en la provincia". San Juan cuenta con varios proyectos mineros que, con el marco adecuado, podrían activarse, brindando un microclima de previsibilidad y seguridad jurídica que ha faltado en el país.
Beneficios tributarios y estabilidad normativa
El RIGI incluye una serie de beneficios tributarios, aduaneros y cambiarios, ofreciendo una estabilidad normativa que Castro considera esencial para atraer inversiones. "De nada le sirve a un inversor obtener beneficios a nivel nacional si los pierde a nivel provincial. La provincia debe garantizar la certeza al inversor, evitando nuevos impuestos o eliminando excepciones", explicó el legislador provincial. En un sector donde solo uno de cada mil proyectos se convierte en una mina activa, la provincia debe aprovechar esta oportunidad para desbloquear su potencial minero.
El impacto transformador de la minería
Castro, oriundo de Sarmiento, una de las principales localidades caleras del país, se graduó en Ingeniería de Minas hace nueve años en la provincia de San Juan. "Siempre he creído en la minería como un motor de desarrollo sostenible", dijo. "Más allá de los beneficios tributarios, la minería impulsa el desarrollo de pequeños proveedores, el crecimiento de las industrias locales y la generación de empleo. En San Juan, el empleo privado no ha crecido en la última década. Realmente necesitamos esta herramienta".
La minería como política de estado
La minería ha sido durante años una política de estado en San Juan. Castro subrayó que, aunque el RIGI beneficia a diversas industrias, su potencial impacto en el sector minero es innegable. "Es difícil entender la oposición al RIGI en una provincia donde la minería es fundamental. Profesionales de todo el país quieren regresar a San Juan para trabajar. La gente en la calle pide empleo. Esto va más allá de partidos políticos. Es por el bien de la provincia y de los ciudadanos sanjuaninos", concluyó.
Un llamado a la unidad por el bien de San Juan
En un contexto económico desafiante, el ingeniero Andrés Castro hizo un llamado a la unidad y a la comprensión de las necesidades de la provincia. "Me cuesta mucho entender la postura de quienes se oponen al RIGI. Esto es por el bien de San Juan y de sus ciudadanos. Necesitamos dar un salto en nuestra economía y aprovechar el potencial que nos ofrece la minería", finalizó.
