¿Sos una persona valiosa?
La respuesta es un poco complicada, primero deberíamos reflexionar qué es ser valioso, y cada uno de nosotros seguramente tiene una respuesta distinta. Como decíamos hace un par de semanas cada persona es un observador diferente y sus pensamientos son totalmente únicos y válidos.
Veamos el significado de la palabra valor:
Valor según el diccionario, es el grado de utilidad que se le da a algo para satisfacer las necesidades, proporcionar bienestar o producir deleite.
Hasta el diccionario, es confuso al momento de definir la palabra valor. Esto es porque depende de lo que queramos evaluar para poder definir su valor. Tenemos que considerar el contexto, la situación, el objeto involucrado, las personas que intervienen y muchas otras cosas.
Podemos pensar en el valor según la importancia que le damos a algo. Por ejemplo, los amigos, la familia, el trabajo, la educación, la profesión. O tal vez, la amistad, el respeto, la honestidad, la sinceridad.
También hablamos de valor cuando nos referimos al precio monetario de un bien o servicio.
Valor puede ser el coraje o la valentía, cuando enfrentamos situaciones, sentimos miedo o estamos en peligro.
Puede tener un sentido ético, o sea cuando actuamos de acuerdo a nuestros valores.
Es decir que la palabra tiene múltiples acepciones y puede ser muy abstracta.
Lo fundamental es cultivar el valor personal.
Sentirse valioso es lo que da sentido a la vida.
¿Qué sería sentirse valioso?
Para sentirme valioso es necesario reconocer las cualidades y habilidades que tenemos, todos las tenemos, reconocer nuestro valor es una tarea difícil pero no imposible. Cada persona debe apreciarse sean las situaciones que sean, con sus fortalezas y debilidades, sus características, sus creencias y aprendizajes. Implica tener una imagen positiva de nosotros cada día y a lo largo de toda la vida, con autocomprensión y autorreconocimiento. Llegamos allí a la autoestima.
Para sentirnos valiosos, tenemos que fortalecer y estimar la persona que somos, con aciertos y errores, cuidando el bienestar emocional a través de pensamientos saludables, permitiéndonos disfrutar cada momento, creando nuestra imagen sin tener en cuenta las opiniones de los demás.
Te dejo algunos tips para conservar y aumentar tu valor personal:
- Ser agradecido, por los pequeños logros y alegrías que sumadas día a día se convierten en montañas gigantes.
- Compartir momentos con otras personas, brindar y recibir apoyo contribuye al bienestar emocional y social.
- Buscar el equilibrio entre los distintos aspectos de la vida, trabajo, ocio, ejercicio, distracción, hobbies.
- Aprender todo el tiempo, mantener la curiosidad, alimentar las pasiones.
- Ser amigable con uno mismo.
- Soñar.
- Sonreir.
- Felicitarse por cada día vivido.
- Meditar a menudo.
- Descansar y dormir bien, además del trabajo que alimenta el alma, el cuerpo necesita relajarse, reponerse y cargarse de energías.
- Reflexionar antes de dormir.
- Permitirle a la noche la quietud que nos proporciona.
- ¿Qué pensás? ¿Te parece practicarlo?
Te invito a que lo hagas, los resultados pueden ser sorprendentes.
Y si necesitás alguien que te acompañe, podés probar hacer una sesión de coaching, recuerda que los coaches ontológicos estamos a tu disposición para hacerte preguntas que te hagan pensar, te ayuden a encontrar distintos caminos y puedas elegir entre uno de ellos.
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