La derecha de Marine Le Pen, gana en primera vuelta

En un giro significativo en la política francesa, la Agrupación Nacional (AN) ha emergido como la fuerza más votada en la primera vuelta de las elecciones legislativas celebradas este domingo. Según las estimaciones de Ipsos, el partido de extrema derecha y sus aliados obtuvieron un 33.5% de los votos, superando al Nuevo Frente Popular (NFP), la alianza de las principales formaciones de izquierda, que obtuvo un 28.1%. La coalición presidencial, Juntos por la República, se situó en tercer lugar con un 20.7%, seguida de Los Republicanos con un 10%.

Las primeras proyecciones de Ipsos sugieren que la Agrupación Nacional podría obtener entre 230 y 280 escaños en la Asamblea Nacional, aunque esto no les otorgaría una mayoría absoluta, que requiere 289 escaños. El Nuevo Frente Popular podría obtener entre 125 y 165 asientos, mientras que la mayoría presidencial podría enviar entre 70 y 100 diputados, una significativa disminución respecto a sus actuales 250 escaños. Los Republicanos se proyectan con entre 41 y 61 escaños.

La segunda vuelta, programada para el 7 de julio, será decisiva para determinar la composición final de la Asamblea, ya que los resultados de la primera vuelta sirven para definir los candidatos que avanzan a la final en cada circunscripción.

#### Reacciones de los Líderes Políticos

El presidente Emmanuel Macron ha hecho un llamado a una "unión amplia claramente democrática y republicana" para enfrentar a la extrema derecha en la segunda vuelta. La coalición presidencial ha pedido a sus candidatos en tercera posición que se retiren en favor de aquellos capaces de derrotar a AN, siempre que compartan los valores republicanos fundamentales.

Marine Le Pen, líder de AN, celebró los resultados y llamó a una mayor movilización para la segunda vuelta, destacando la necesidad de evitar que el país caiga en manos del NFP, al que describió como una "extrema izquierda con tendencias violentas".

Por su parte, Jean-Luc Mélenchon, uno de los líderes del NFP, instó a sus votantes a bloquear cualquier avance de AN, anunciando la retirada de los candidatos del NFP que hayan quedado en tercera posición en las circunscripciones donde la extrema derecha lidera.

Alta participación electoral

La participación en estas elecciones ha sido notablemente alta, alcanzando un 59.39% a las 17:00 horas, comparado con el 39.4% registrado a la misma hora en 2022. Este aumento en la participación refleja la importancia que los votantes han atribuido a estas elecciones, con muchos expresando su deseo de evitar una victoria de la extrema derecha.

La tradición parlamentaria francesa dicta que el partido con la mayoría en la cámara baja forma y dirige el gobierno. Sin embargo, Jordan Bardella, presidente de AN, ha declarado que no aceptará el puesto de primer ministro sin una mayoría absoluta, lo que podría llevar a un bloqueo institucional.

La unidad de los partidos de izquierda ha creado la alternativa más fuerte contra una mayoría de extrema derecha, mientras que la derecha tradicional, representada por Los Republicanos, enfrenta divisiones internas que han complicado su campaña.

En un contexto de alta movilización y significativas divisiones políticas, el resultado de la segunda vuelta será crucial para el futuro político de Francia.