Se roba un secarropas y lo atrapan, pero zafa de ir al penal
Un hombre se metió a una casa y se llevó un secarropas entre otras cosas. Este jueves lo condenaron, pero zafó de ir al penal.
En un operativo rápido y efectivo, la policía de San Juan logró la aprehensión de un individuo identificado como Algañaraz, quien fue sorprendido en flagrancia mientras robaba en una vivienda ubicada en el Barrio Conjunto 12. La intervención policial se dio gracias a la rápida acción de la víctima y su hijo menor, quienes lograron identificar al delincuente y proporcionaron detalles clave para su captura.
Alrededor de las 10:45 horas del 31 de mayo, la víctima se encontraba en el interior de su vivienda cuando escuchó ruidos provenientes del exterior. Al observar por la ventana del comedor, vio a un sujeto con un tatuaje en el cuello, de tez blanca, contextura delgada y aproximadamente 1.60 metros de estatura, que vestía un pantalón de buzo gris claro, una campera tipo buzo verde con cierre frontal desprendido, una remera mostaza y zapatillas grises oscuras. El individuo estaba saltando la puerta del cierre perimetral de la vivienda, que tiene una altura aproximada de 2 metros, llevándose consigo un secarropas color blanco, marca Drean, propiedad de la víctima.
Ante esta situación, la víctima le gritó al sujeto para que desistiera de su acción, lo que llevó al delincuente a emprender la huida a pie hacia el Barrio Conjunto 12. El hijo menor de la víctima salió en persecución del malhechor, logrando que este descartara el secarropas y pudiendo identificarlo como Algañaraz, un conocido de la zona.
Al regresar a su vivienda, la víctima descubrió que faltaban varios efectos personales, incluyendo una tijera de podar, una azada, una pala de punta cuadrada y un bolso tipo morral con herramientas varias (tenazas, pinzas, llave francesa, destornilladores, serrucho). Inmediatamente, se comunicaron con el 911.
El personal policial, con las características proporcionadas, inició la búsqueda del sospechoso, logrando su aprehensión alrededor de las 11:30 horas en las inmediaciones. Durante el procedimiento, se le practicó a Algañaraz un palpado de seguridad y se encontró entre sus prendas una pinza de mano color azul, que luego fue reconocida por la víctima como de su propiedad.
En el juicio abreviado, Algañaraz fue condenado a cumplir la pena de 1 año y 8 meses de prisión de cumplimiento condicional.
