A 13 años de un momento de gloria puyutana
En la noche fría de Tucumán del 26 de junio, con un estadio de San Martín repleto, once voluntades sanjuaninas vestidas de verde y blanco daban el gran golpe que desató la locura en la zona de Desamparados por el ascenso a la B Nacional.
El uno a cero del partido de ida tenía sabor a poco. Ese gol de Lisandro Beratz solo alcanzaba para saber que Desamparados había ganado, que tenía solo eso.
Desde afuera parecía una misión imposible, que si se conseguía sería una epopeya futbolística. Bastaba con mirar atrás para darse cuenta que el proceso de esa temporada había sido revoltoso, complicado con cambios de técnico en el camino, falta de presupuesto, viajes complicados, sueldos atrasados…
La realidad no se reflejaba el campo de juego. No sé por qué. Pocos lo sabían. Solo los que formaban parte del Desamparados 2011 versión Luis Recupero y Daniel Garay.
Alla fueron los jugadores con la soledad más grande dirigencial pero el respaldo de los hinchas más pasionales de San Juan como lo son los Puyutanos.
La fría noche de Tucumán, en la que solo se pensaba en la revancha de la promoción de la B Nacional y el Argentino A, porque a nadie le importaba el descenso de River. Todo era del Ciruja, del Albirojo de San Martín de Tucumán.
Los once de Sportivo Desamparados que se transformaron en héroes la pelearon ante un estadio lleno, un público adverso, arbitraje en contra…todo absolutamente era malo. Y ante eso once voluntades se pusieron el overol, trabajaron y no se rindieron.
El fútbol le tiró un toque de justicia a un jugador castigado por muchos hinchas y por varios periodistas entre los que me incluyó a Emanuel Reinoso le caímos con todo el rigor, sin embargo, el Flaco se la bancó y la varita mágica lo bendijo con un golazo para ponerlo en ventaja 1 a 0 a media hora del final de la revancha.
La gloria estaba al alcance de la mano pero solo lo podían sentir los once jugadores, los suplentes, cuerpo técnico y ese diminuto puñado de personas que viajaron.
El gol del empate llegó y el sufrimiento en los últimos 15 minutos fueron los mas angustiantes que vivieron los hinchas puyutanos. El pitazo final de Juan Pablo Pompei desató el silencio mas sepulcral que se escuchó en Tucumán, pero a su vez el grito mas loco de 20 voluntades que retumbaron en San Juan desatando la fiesta en la plaza Desamparados.
Desamparados concluyó una campaña memorable, cargada de problemas extrafutbolísticos pero con el amor propio de un grupo de voluntades que resistieron por ellos y por la gente, por el hincha, por el que pagó una entrada, por su familia por el orgullo de San Juan.
La formación de Desamparados
Diego Aguiar, Lisandro Beratz, Mauricio Del Cero, Ariel Bart; Gerardo Corvalán, Hernan Lamberti, Omar Diaz, Augusto Alvarez, Matías Garrido; Emmanuel Reinoso y Cristian Perez.
DT: Daniel Garay.
Hernán Lencina ingresó por Del Cero, Oscar Saiz por Garrido y Santiago Ceballos por Perez.
