Sabemos quién perdió, pero no sabemos quién ganó en el desmanejo de la OSP

A los pocos días del nombramiento de Rodolfo Fasoli como interventor de la Obra Social Provincia una de sus primeras acciones fue hablar del estado financiero de la entidad que atiende las necesidades de salud de más de 155 mil afiliados en toda la provincia. En términos claros, explicó que la anterior administración, que estuvo encabezada por Miguel Greco en la anterior gestión había dejado los números en rojo. Esta situación aún persiste, aunque el ex gobernador y actual senador Sergio Uñac diga lo contrario.

Para remitirse a los problemas financieros que tiene la Obra Social Provincia, uno de los puntos que se tienen que abordar es lo que ocurrió con el IVAF- Instituto de Verificación y Auditoría Farmaceutica-.  De acuerdo a lo que contaron fuentes de ACLISA y del Colegio Médico, el IVAF era un ente que se encargaba de auditar las recetas médicas de cada uno de los afiliados. En todos los casos, la persona se atendía con el profesional llevaba la receta al IVAF y ellos se encargaban de autorizarla, lo mismo ocurría con los pacientes internados en las clínicas privadas, pero en este caso eran las instituciones las que atendían al paciente, le colocaban los remedios y luego enviaban el pedido de autorización, pues la prioridad era el paciente.

Pero el tema no queda solo ahí. Este ente – IVAF-, que se disolvió en el 2022 también era el encargado de conseguir la medicación que otorgaba la Obra Social Provincia. Por lo cual auditaba y luego tenía nexos directos con tres droguerías LOWSEDO S.R.L , SEGUERMED S.R.L. y Del Sur.

El tema comenzó a complicarse a finales de 2022, cuando el IVAF comenzó a ralentizar el trabajo de auditorías y por ende, el de devolución de los medicamentos. Fuentes consultadas en ACLISA confirmaron que producto de esa relación, les quedó una deuda superior a los 800 millones de pesos y de unos 240 millones de pesos en el Colegio Médico. También tienen una deuda con la Asociación Médica Sarmiento. Vale mencionar que el componente medicamentos representa el 40% de la atención del paciente.

Lo cierto, es que una vez una vez que el IVAF se disolvió, tenía en su poder un volumen de recetas para auditar que era varias veces millonario y tampoco hizo la respectiva reposición de medicamentos.  Por lo tanto, quien hereda este problema es la Obra Social Provincia, que aún tiene esta deuda con los prestadores de salud. El tema es ¿qué hizo la administración anterior para que los responsables de esta deuda se hicieran cargo? Evidentemente fue un fracaso la gestión pues la deuda está y los prestadores han hecho el reclamo por medicamentos a la obra social.

El doctor Carlos Bordes, presidente del Colegio Médico, al definir la función del IVAF sostuvo que "era una empresa que estaba contratada por Obra Social Provincia por las autoridades del gobierno anterior. Era el sistema por el cual se nos reintegraba la medicación a todas aquellas instituciones que atendíamos a pacientes de la Obra Social Provincia".  Reconoció que en su momento la deuda era mayor, pero se fue achicando con algunas negociaciones con la obra social.

Si se habla del IVAF y su disolución, desde todos los sectores la respuesta es similar. Era muy caro su servicio.  De todos modos, no se hizo nada cuando esta empresa, que estaba vinculada a un sector de la actividad farmacéutica, se fue y dejó semejante pasivo.

Hoy los prestadores médicos del sector privado siguen con esta deuda y en algunos casos es un importante pasivo que tienen. Por ejemplo, desde el Colegio Médico se afirmó que "es parte de los problemas que tenemos para poder enfrentar algunas recomposiciones salariales".

Por parte de la actual administración de la Obra Social Provincia, hay un reconocimiento de la deuda y son conscientes que le tienen que hacer frente. Sin embargo, saben que esto llevará tiempo, pues una de las cosas que se proponen antes de hacer el pago es auditar cada uno de los medicamentos reclamados por los prestadores.

Las empresas han hecho sus reclamos, por la cantidad de los medicamentos que se les adeudan. De hecho, en algunos casos creen que lo más conveniente es que les paguen la deuda.

¿Cómo funcionaba el sistema IVAF en el caso de las internaciones de pacientes?
Según explicaron desde las clínicas cuando había una persona internada y le tenían que aplicar un medicamento lo hacían y luego presentaban las recetas respectivas al IVAF para que la autorizara. El tema es que las autorizaciones siempre fueron lentas, por lo que la clínica que aplicaba un medicamento – por ejemplo, de alto costo-, lo tenían que comprar para mantenerlo en stock por si lo tenían que utilizar en algún otro paciente.  Por lo que cuando el ente auditor devolvía el medicamento a la clínica en muchos casos se encontraba con dos medicamentos del mismo tipo.

La justificación de las demoras era que los medicamentos no se venden fraccionados, por lo cual, si aplicaban una dosis a un paciente en un determinado nosocomio, no le podían devolver la dosis de inmediato porque no se la vendían y tenían que esperar a que haya una caja completa del medicamento en cuestión.

Siguieron los negocios
Lo cierto es que el desmanejo de la Obra Social Provincia durante la anterior administración fue notoria. Sin cerrar el pasivo que dejó el IVAF, la administración que conducía Miguel Gecco durante el gobierno de Sergio Uñac contrató otros consultores externos, que fuentes relacionadas al sector consideraron que eran caros e igualmente burocráticos que sus antecesores del IVAF.

Sobre el tema, el actual interventor de la obra Social Provincia afirmó que a partir de 2022 luego de la disolución del IVAF, "la auditoría estaba tercializada con un alto costo con una empresa de Buenos Aires. Incluso los tratamientos ambulatorios se mandaban de la obra social todos los papeles a Buenos Aires en cajas, para que se auditaran allá, y acá se ejecutaba el pago". Como detalle marcó que cada vez que enviaban los papeles tenían un costo de 4 millones de pesos con Correo Argentino.

A pesar de estos controles, que se hacían fuera de la provincia, "hemos detectado muchísimas falencias, por lo cual dijimos que no nos servía". Desde la Obra Social afirmaron que el costo era elevadísimo. A esto "lo bajamos y no pagamos auditoría tercializada".

El doctor Fasoli explicó que "tenemos que incorporar más gente acá para hacer el control, pero nunca vamos a gastar el dinero que se gastaba en la auditoría tercializada".  Explicó que este trabajo lo hacían con una empresa que se llama GMS, que auditaban remedios de alto costo y protesis. También estaba ProSanitas que se encargaba de auditar los costos de internación".

La modalidad impuesta por la gestión de Fasoli es que los controles se hagan en la provincia y de esa forma ser austeros y ahorrar fondos. "Hoy las auditorias se hacen de manera interna y se está reestructurando el sistema para hacerlo la obra social".

Es por ello que tienen como objeto la incorporación de personas para que se encarguen de hacer la auditoría, pero siempre dentro del marco de la OSP. La gente que ingrese "nos va a ayudar a tener un sistema propio, con control propio. Cuando llegué acá no sabíamos ni cuántos pacientes diabéticos tenía la obra social, porque era toda información que tenían las empresas tercializadas, y no nosotros".

En camino a la normalización
En la actualidad de acuerdo a lo que explicó el doctor Fasoli están trabajando con un servicio de farmacia propia. "Esto nos permite hacer cotización de distintas drogas y medicamentos. A su vez buscar el más conveniente a los fines de generar un ahorro", explicó el funcionario.

Detalló que a partir de la disolución del IVAF hubo un par de meses de desorden, pero esto se está normalizando "es en beneficio de los pacientes, porque en la medida que nosotros podamos armar bien esto- la farmacia propia-, estoy seguro que el paciente va a ser el principal beneficiado. En muchos medicamentos de alto costo el paciente paga el 20%, el 40%".

La nueva modalidad le permite a la OSP tener la posibilidad de conseguir el medicamento a partir de la apertura de los proveedores mejores precios en los medicamentos y que de esa forma tengan un precio más razonable

¿Quién se hizo millonario? Más dudas que certezas
Lo cierto es que semejante pasivo en deuda, supera los mil millones de pesos, en algún bolsillo están,  aparentemente y esa hipótesis sin esfuerzo cabría que, evidente alguien se benefició en este sistema raro, burocrático y anti sistémico que contrato muchos años la gestión de la Dra. Alejandra Venerando(hoy empleada judicial), Greco, - actual funcionario del gobierno de Javier Milei- con aval del ex gobernador Sergio Uñac, pero lo llamativo de todo esto es la pasividad o posible negligencia en la ex gestión Uñaquista en no hacer nada para cobrar o regularizar la prestación del servicio, ya que lo lógico hubiera sido evitar que la deuda se hiciera millonaria, que es lo que la actual gestión ha hecho, entonces brotan interrogantes, ¿Por qué no se cortó esta deficiente prestación de servicio a la obra social, antes que la deuda sea millonaria?, ¿Por qué durante la gestión del ex gobernador Sergio Uñac, no se inició un reclamo judicial o denuncia penal por estafa a IVAF o las droguerías implicadas?, claramente no se entiende que un gobierno haya dejado que semejante deuda llegue las cifras millonarias, al punto tal que esta circunstancia sería aparentemente una de las responsables de la crítica y grave situación que hoy atraviesas todas las clínicas y sanatorios de San Juan, cuyo costo principalmente ha recaído en despidos de trabajadores y en el afiliado.

No deja de llamar la atención, tanta pasividad, tanta negligencia en permitir que se le adeuden al estado provincial más de mil millones de pesos y no buscar reclamar cobrar un centavo de ello, está sola hipótesis deja a interpretar o pensar que esto habría sido un millonario negocio para solo algunos, la única certeza es que perdió la Obra Social, el sistema de salud, el afiliado y las clínicas y sanatorios.