Detectan 160 comedores fantasma en Santa Fé
De acuerdo al relevamiento, los comedores no existían o no cumplían con las funciones en las que estaban registradas.
El escándalo por el almacenamiento y no distribución de alimentos sigue escalando y ahora se ha trasladado al interior de muchas provincias, entre ellas Santa Fe. A través de una serie de auditorías, se lograron detectar "comedores fantasmas" y severas irregularidades en numerosas instituciones.
La auditoría, que comenzó meses atrás, ha relevado hasta ahora más de 480 instituciones, lo que representa el 60% del total de las que prestan servicios en toda la provincia, concentrándose principalmente en Rosario y Santa Fe. Este jueves se conoció que 160 merenderos fueron dados de baja y denunciados penalmente por no ejercer la tarea para la cual estaban inscriptos. "Sustitución de identidad, lugares y espacios baldíos son algunas de las cosas que se encontraron", enumeró Victoria Tejeda, ministra de Igualdad de la provincia.
Las primeras presentaciones en tribunales de Santa Fe ocurrieron el 21 de febrero, y posteriormente se realizaron otras ampliaciones de denuncias, según informaron los funcionarios provinciales en conferencia de prensa. A pesar de estos problemas, aclararon que muchas otras organizaciones sociales trabajan adecuadamente y cumplen con los requisitos establecidos.
"Nunca se cortó el diálogo ni el acompañamiento alimentario con las instituciones", explicaron desde Desarrollo Social. Además, remarcaron la importancia de avanzar con la auditoría rápidamente para obtener un diagnóstico completo que permita tomar nuevas medidas para mejorar la transparencia y atender las demandas de las instituciones que cumplen correctamente con su labor.
Según cifras oficiales, cerca de 300,000 santafesinos reciben asistencia alimentaria, ya sea directamente o a través de comedores, merenderos y copas de leche. Sin embargo, la demanda sigue en aumento. En los últimos meses, los pedidos de ayuda alimentaria han crecido en un contexto de crisis económica y social, donde el 48.9% de las familias del Gran Santa Fe vive en la pobreza y un 15.5% en la indigencia.
En el último mes, la demanda ha aumentado entre un 25% y un 30%. "Rosario es el lugar de mayor demanda", reconocieron desde el Gobierno.
