Análisis del ingeniero Omar Zamorano sobre la producción ganadera en feedlots
El crecimiento de las exportaciones de carne en los últimos tiempos dio aire a los productores que tienen corrales de engorde en destinos como San Juan
El ingeniero Omar Zamorano, especialista en producción ganadera local, brindó un análisis detallado sobre la situación actual de los feedlots en San Juan. Destacó la volatilidad del mercado y los desafíos que enfrentan los productores, en tiempos de crisis.
"A nivel nacional, todo está muy volátil. La mejora en las exportaciones ha sido un factor clave en los últimos meses, traccionando el mercado local al reducir la oferta interna y mejorar los precios," explicó Zamorano. A pesar de que las exportaciones no han alcanzado niveles excepcionales, han mostrado una tendencia firme desde 2023 y continúan en 2024.
El ingeniero señaló que las exportaciones han sido fundamentales para mantener a flote a los productores locales en medio de una caída significativa en el consumo interno de carne debido a la inflación y la situación económica del país. "Si no hubiésemos tenido este nivel de exportación, el consumo local hubiera sido insuficiente para sostener a los productores," afirmó. Esto sin dudas es una de las acciones que potencia a los productores ganaderos que se encuentran en las áreas periféricas como San Juan.
La reciente eliminación de retenciones anunciada por el presidente también genera expectativas positivas, aunque Zamorano advierte sobre la incertidumbre que esto conlleva. "Este "veranito" que estamos experimentando podría sostenerse, lo cual sería un gran alivio para el sector. Sin embargo, hay que ver cómo se desarrollan las cosas," comentó.
En cuanto al consumo interno, Zamorano observó un cambio significativo en los hábitos alimentarios de la población. "A pesar de la baja en el precio de la carne bovina, el consumo no se ha recuperado debido a la difícil situación económica. Muchas personas han optado por alternativas más económicas como el cerdo y el pollo," dijo.
Este ajuste en el consumo local se alinea con tendencias globales. "En países desarrollados, el consumo de carne bovina es mucho más moderado. Estamos viendo un ajuste similar en Argentina, aunque no nos guste," señaló Zamorano, quien agregó que nadie quiere asumir el costo político de recomendar un cambio en la dieta hacia más pollo y cerdo y menos carne bovina.
La situación de los feedlots también ha sido difícil. "Antes de que las condiciones mejoraran, muchos corrales estaban en números rojos y algunos productores se retiraron de la actividad. Los pequeños productores no tienen la capacidad financiera para soportar pérdidas continuas, por lo que han tenido que cerrar," explicó.
Zamorano destacó una de las ventajas de la ganadería intensiva en feedlots, que permite a los productores ajustar su producción según las condiciones del mercado. "Si el número no da, puedes cerrar un corral y reactivarlo cuando las condiciones mejoren. Sin embargo, esto no es viable para todos, especialmente para los productores pequeños," añadió.
