El argentino Cerúndolo, el único que sigue con vida

El tenista argentino Francisco Cerúndolo, 27° del ranking y cabeza de serie número 23, regresó a los octavos de final de Roland Garros un año después tras derrotar al complicado estadounidense Tommy Paul (14°) pese a un arranque impreciso y a contramano, consiguió imponerse por 3-6, 6-3, 6-3 y 6-2, en 2 horas y 50 minutos.

El porteño, que encara su tercer Abierto de Francia, intentará superar la ronda a la que arribó el año pasado cuando fue eliminado por el danés Holger Rune (tie-break en el quinto).

Quien es la segunda raqueta nacional cumplió la meta de superar la primera semana, y ahora va por llegar más lejos que hasta ahora en el torneo de París. Pero no la tendrá fácil pues cualquiera de sus rivales posibles el lunes son de temer. Sobre todo uno, Novak Djokovic (1), quien anoche, al cierre de esta edición, igualaba 1 a 1 (7-5, 6-7) con el italiano Lorenzo Musetti (30).

El otro argentino que jugó en tercera ronda, Tomás Etcheverry (29) perdió con el noruego Casper Ruud (7) por 4-6, 6-1, 2-6 y 2-6.

 "Me gustaría jugar con Djokovic… Sería un lindo premio. No sé cuántas chances voy a tener de hacerlo", dijo Cerúndolo, de 25 años, 12 menos que el serbio ganador de 24 Grand Slams.

Además, Fran comentó: "Estoy muy contento, al principio sentía que no podía desbordarlo y a partir del segundo set jugué mucho mejor y dominé bastante".