El clásico pocitano no terminó bien

El partido en lo deportivo fue impresionante de emotivo porque con 9 hombres, Aberastain que lo perdía 4 a 1 se puso a tiro descontando y llegando a ponerse 4 a 3.

Hasta ese momento los goles del local Atenas los convirtieron Gastón Vega, Pedro Terrero por duplicado y Ezequiel Giménez. Al cabo del primer tiempo el descuento para el Naranja había llegado a través de Manuel Escudero.

En el segundo tiempo Juan Barboza y Paulo Garín pusieron al  deportivo Aberastain a punto de marcar la epopeya ya que jugaba con 9 hombres por las expulsiones de Jesús Sánchez y Franco Costa.

Pero llegó el fatídico minuto 30 del segundo tiempo, cuando un hincha de Atenas se descolgó del alambrado con un caja encendida de fuego (simulando un cajón de muertos con los colores naranjas).

Corrió hasta la mitad de cancha y se hizo notar. No llegó a agredir a nadie debido a la rápida intervención de los jugadores de Atenas que le pidieron que se vaya  y que después que llegó la policía emprendió la retirada hacia la tribuna norte donde estaban sus compañeros y con una habilidad enorme rápidamente escapó de la persecución policial.

En ese momento en el banco de suplentes de Aberastain los jugadores que se encontraban allí salieron corriendo hacia la mitad de cancha reclamando agresiones de los plateístas de Atenas.

Lo curioso vino después porque los jugadores del Naranja encararon hacia el vestuario y se encerraron allí señalando que no estaban dadas las condiciones de seguridad para seguir el juego.

En ese momento el árbitro del partido Enzo Gómez habló con el Jefe del Operativo y al parecer le dio las garantías para seguir, pero en la cancha solo estaban los de Atenas.

Después de 10 minutos el capitán de Aberastain Escudero, salió al campo de juego para mantener una reunión con el árbitro y con el capitán de Atenas. En el diálogo escuchado a través de Radio Santa Cecilia, se escucha al jugador Escudero decir "Nosotros volvemos, pero a la mínima nos vamos y acuérdense que cuando fueron allá no les pasó nada" haciendo clara referencia a que iban a volver a jugar.

Los jugadores de Atenas se acomodaron para re iniciar el juego, el árbitro pito una vez su silbato pero los de Aberastain no aparecieron . Luego de 4 minutos lo volvió a hacer sonar y los visitantes no aparecieron y el juez dio por suspendido el partido. Ahora resolverá el Tribunal de Penas de acuerdo al informe del árbitro.