El presidente iraní Ebrahim Raisi muere en un accidente de helicóptero
Junto con él, también murió el ministro de Asuntos Exteriores, Hossein Amirabdollahian, y otros pasajeros. Las autoridades confirmaron que los restos del helicóptero fueron hallados tras una búsqueda nocturna en medio de una ventisca.
El presidente iraní, Ebrahim Raisi, falleció en un trágico accidente de helicóptero en terreno montañoso cerca de la frontera con Azerbaiyán, según informaron las autoridades y medios estatales el lunes. El líder de línea conservadora, quien era considerado un posible sucesor del ayatolá Alí Jamenei, murió junto con el ministro de Asuntos Exteriores, Hossein Amirabdollahian, y otros pasajeros del helicóptero.
Los restos carbonizados del helicóptero Bell 212, de fabricación estadounidense, fueron hallados a primera hora del lunes tras una búsqueda nocturna en medio de una ventisca. "El presidente Raisi, el ministro de Asuntos Exteriores y todos los pasajeros del helicóptero murieron en el accidente", declaró un alto responsable iraní a Reuters, bajo condición de anonimato debido a la sensibilidad del asunto.
La muerte de Raisi fue confirmada posteriormente por el vicepresidente Mohsen Mansouri en redes sociales y en la televisión estatal. Las imágenes del lugar mostraban que el helicóptero se había estrellado contra la cima de una montaña, aunque aún no hay información oficial sobre la causa del accidente.
Los equipos de rescate lucharon contra tormentas de nieve y terrenos difíciles durante la noche para llegar a los restos de la nave accidentada en la provincia de Azerbaiyán Oriental. "Tras el descubrimiento del lugar del accidente, no se han detectado señales de vida entre los pasajeros del helicóptero", informó Pirhossein Kolivand, presidente de la Media Luna Roja iraní, a la televisión estatal.
En un vídeo se mostraba a un equipo de rescate acurrucado en torno a un dispositivo GPS mientras buscaban en una ladera de montaña completamente oscura en medio de la ventisca. La televisión estatal suspendió su programación habitual para transmitir las oraciones que se realizaban por Raisi en todo el país.
Reacciones internacionales
Varios países expresaron su preocupación y ofrecieron su ayuda tras la noticia del accidente. La Casa Blanca informó que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, había sido notificado de la situación. China manifestó su profunda preocupación, mientras que la Unión Europea ofreció tecnología cartográfica por satélite de emergencia.
Un líder de línea dura y posible sucesor de Jamenei
Raisi, de 63 años, fue elegido presidente en 2021 y, desde que asumió el cargo, implementó un endurecimiento de las leyes morales, supervisó una represión sangrienta de las protestas antigubernamentales y presionó en las conversaciones nucleares con las potencias mundiales. Su mentor, el ayatolá Alí Jamenei, líder supremo desde 1989, tiene la última palabra sobre todas las políticas importantes en Irán.
Durante años, Raisi fue visto como un fuerte contendiente para suceder a Jamenei. Su victoria en las elecciones de 2021 puso a todas las ramas del poder bajo el control de los partidarios de línea dura, tras ocho años de presidencia del pragmático Hassan Rouhani.
El accidente se produce en un momento de creciente disidencia dentro de Irán debido a múltiples crisis políticas, sociales y económicas. Los gobernantes clericales enfrentan presión internacional por el controvertido programa nuclear de Teherán y sus vínculos militares con Rusia durante la guerra en Ucrania.
Raisi había estado en la frontera con Azerbaiyán para inaugurar la represa Qiz-Qalasi, un proyecto conjunto de ambos países. El presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, quien se despidió amistosamente de Raisi ese mismo día, ofreció su ayuda en el rescate.
