Vecinos reclaman que derrumben un "aguantadero de delincuentes"

Los vecinos de Chimbas que residen cerca del cruce de Cipolletti y Benavidez están viviendo horas muy desagradables debido a una ola de robos en la zona, y por ello están solicitando al Gobierno que derrumbe lo que han calificado como un "aguantadero" de delincuentes.

Se trata de una vivienda que aseguran pertenece al Instituto Provincial de la Vivienda (IPV), pero que se encuentra abandonada. Según los vecinos, esta casa ya ha sido escenario de varios hechos delictivos y la policía ha detenido a varios delincuentes que se esconden en su interior después de cometer algún robo.
Sofía Montero, una de las últimas víctimas de los delincuentes que se alojan en esta vivienda, dialogó con Zonda Noticias y describió la terrible situación que están atravesando. "Este jueves cuando llegamos a casa con nuestras hijas después de buscarlas en la escuela, nos encontramos con una persona que entró corriendo a nuestra vivienda ubicada en la calle Cipolletti, a tres cuadras de Benavidez. Este joven ingresó por el fondo y se había metido por la ventana. Él estaba dentro de nuestra casa y ya había sacado algunas de nuestras pertenencias y las había dejado en la casa abandonada que está a unos 30 metros de mi vivienda", contó la mujer.

En este contexto, la vecina lamentó que "este lugar se presta para la delincuencia. Se ha convertido en un refugio para los delincuentes". Según la vecina, los malvivientes tienen vía libre, ya que hay un descampado en el fondo de la casa abandonada. "Cada vez que roban, guardan las cosas ahí y luego se escapan por el descampado, que es tierra de nadie".
Respecto a su caso, la mujer agradeció a "Dios que, entre mi marido y la policía, pudieron reducir al delincuente. Él había robado herramientas del trabajo a mi marido, además de llevarse un equipo de música que había dejado escondido en la casa abandonada".

La mujer comentó que ella y sus vecinos han reclamado en varias ocasiones que se derrumbe esta vivienda, no solo porque allí se producen hechos delictivos, sino también porque hay una pareja que de vez en cuando se mete a vivir en ese lugar.
"Necesitamos una solución, este lugar se ha convertido en un refugio para los delincuentes. Estamos desesperados porque esta es la segunda vez que han agarrado a delincuentes dentro de esa vivienda", manifestó Montero. Finalmente, la mujer agradeció que gracias a Dios no estaban ella ni sus hijas en casa cuando ocurrió el hecho, pero lamentó que ahora estén muy asustadas cada vez que salen de su casa.