San Juan sigue siendo una fuente de exportación

España ya no es el país elegido de hace décadas atrás. Portugal es el destino de mayor aceptación por la competitividad en la A y B. Italia se mantiene y Francia sumó adeptos.

Históricamente, jugadores argentinos han cruzado el océano atlántico para hacer carrera en Europa.

Mario Agüero llegó a Italia en 1979 para jugar en Follonica. Daniel Martinazzo lo hizo en 1983 para jugar en Vercelli y, tiempo más tarde, en Liceo.

Desde aquellos años, hasta hoy, no ha existido ni una sola temporada en la que no haya habido un jugador argentino en ligas europeas.

Sin embargo, los tiempos que corren son llamativos. El número de jugadores de Argentina que están militando en Italia, Francia, Portugal o España es muy grande, muy por encima de la media histórica.

Tal vez, el contexto social y económico que se vive en el país esté empujando a los jugadores (y también jugadoras) a continuar su vida en Europa, usando el hockey como la llave para abrir la puerta de algún país con más posibilidades y menos desigualdades.

Incluso, las edades también sorprenden. Porque cada vez son más jóvenes los jugadores que llegan a las ligas europeas por primera vez. Algunos arreglan su llegada, incluso, antes de finalizar sus estudios de secundaria.

Francia
Es un país cada vez más elegido por los argentinos. En principio, el nivel de la liga no es lo más tentador ya que, tal vez, la Liga Nacional de Argentina tenga más nivel deportivo que lo que ofrece Francia.

No obstante, por mínima que sea, una suma en euros tienta a cualquier argentino. Y, si a esto le sumamos un trabajo, es casi imposible rechazar cualquier oferta desde Francia.

Aun cuando el idioma y el clima puedan ser una desventaja.

Son más de 20 los argentinos que prestan servicios en N1 y en N2, entre los que destacan: Guido Pellizzari en Saint-Omer, Julián Martínez en Quévertois, Joaquín Vargas en Coutras, y Agustín Lázzaro, Fabrizio Torres, Fernando Urtubey y Federico Martin en Lyon.

Italia

Ha sido un destino muy elegido, históricamente, por los jugadores argentinos. Una liga competitiva, tentadora y con una sociedad que comparte mucho de las costumbres y culturas de los albicelestes.

Este año son más de 20 los que llegan a la península itálica.

Entre los principales fichajes para esta temporada, destacan: Nicolás Ojeda, Giuliano Giuliani y Emanuel García en Valdagno; Juan José Moyano y Pablo Gómez en Viareggio; Jero García, Bruno Alonso y Facundo Ortíz en Sarzana; el joven Santi Chambella y Conrado Piozzini en Monza; Pablo Saavedra, Tonchi de Oro, Mario Rodríguez y Germán Nacevich en Grosseto; Maxi Oruste en Vercelli; Fernando Montigel en Follonica; y Valentín Grimalt en Lodi.

Portugal
Desde hace algunos años, la liga portuguesa destronó a la española como "La mejor liga del mundo".

Por eso muchos argentinos la eligen, aun si se trata de la segunda división. Es el torneo con más argentinos ya que, entre sus dos principales divisiones, son más de 30 los jugadores oriundos de Argentina que allí se desempeñan.

Entre ellos destacan: los históricos Carlos Nicolía, Pablo Álvarez y Lucas Ordóñez en Benfica; Reinaldo García y Ezequiel Mena en Porto; Conti Acevedo, Darío Giménez y Danilo Rampulla en Barcelos; Gonzalo Romero y Matías Platero en Sporting; y Lucas Martínez y Franco Platero en Oliveirense.

España

Por último, la que supo ser la mejor liga del mundo ya no es lo que era. Barcelona vio pasar por sus colores a talentos como los hermanos Páez, Francisco Velázquez, Carlos López, Pablo Álvarez, entre otros.

Sin embargo, desde hace algunos años, los animadores de la OK Liga ya no son los mismos.

No obstante, la liga no ha perdido su prestigio y sigue siendo un destino muy elegido por los argentinos.

Fabrizio Ciocale, Matías Bridge y Fran Torres defienden los colores del Liceo, mientras que Matías Pascual es el único albiceleste en el Barcelona.
Por último, en el PAS Alcoi, Matias Baieli, Franco Ceschin y Agustín Domínguez mantienen encendida la llama argentina en la OK Liga.

En una liga o en otra, pero argentinos en el hockey sobre patines europeo, siempre habrá. Es que muchos lo miran, ya no como una oportunidad deportiva, sino como una oportunidad de cambio de vida personal y familiar.

Fuente: RHNews