Enamorados de la solidaridad
El Grupo solidario llegó a la Villa La Paz en Rivadavia para compartir con los chicos del asentamiento una jornada muy especial en la cual además de los juegos hubo regalos, chocolate y mucho amor.
Emilse abre sus ojos grandes cuando recibe, de manos de unos de los payasos que animó la jornada, una muñeca.
Lucila esboza una sonrisa cuando recibe el chocolate con la factura.
Pero conmueve ver a María Sol recibir un calzado.
Llegó descalza al lugar del encuentro.
Sentada en una silla, como si fuera una princesa le colocan un gomón.
Si. Algo tan simple como el calzado clásico del verano genera tanta emoción.
Hay sensaciones de alegría y angustia en un mismo instante. De la lágrima de la tristeza se pasa a la lágrima de felicidad.
En un rincón , observando todo está ella.
Sólo mira y sonríe, una vez más su inquietud, su solidaridad, su amor al prójimo gana.
Sandra Pérez sabe que no es suya la victoria, que para que cada niño que vino al improvisado patio de la familia Flores se fue con su gomón.
Entonces las fotos y videos le llegarán a Patricia que donó los 50 pares.
La boca de cada uno de esos chicos llena de chocolate y medialunas regocijará a Héctor Perez y Héctor Moncunill que lo donaron.
Villa La Paz fue uno de los asentamiento mas afectados por las lluvias de enero.
El clima les jugó en contra a cientos de familia, pero por suerte hay seres extraordinarios, como quienes integran Posibilidad para Todos, que traen al menos por un rato una luz de esperanza.
En el día de los enamorados, de los cuales muchos de los chicos que viven allí ni siquiera saben que existe, hubo amor, entrega, solidaridad y respeto para ellos.
