En 12 años, San Juan perdió casi 6.000 hectáreas de viñedos

Un relevamiento realizado por el Instituto Nacional de Vitivinicultura indica que hay una disminución importante de hectáreas cultivadas con viñedos en todo el país. Los datos indican que hubo una caída del 4.9%, lo que contabiliza un total de 10.703 hectáreas menos de viñedos. Si se miran los datos la provincia que más hectáreas perdió es Mendoza con un 4.4% de caída en lo cultivado, sobre un total de 154215 hectáreas que habían en 2010 en 2022 hay 147379 hectáreas, lo que representa que se perdieron 6836 hectáreas en 12 años. 

Pero el impacto más fuerte se siente en San Juan, donde la superficie cultivada cayó el 12.6%, lo que implica una disminución de 5948 hectáreas. Debe decirse que en 2010 habían cultivadas 47228 hectáreas y en 2022 sólo hay 41279 hectáreas cultivadas. Esto sin dudas es una fuerte caída, que está impactada por la falta de rentabilidad, el impacto del urbanismo sobre los perirural, la sequía y el tipo de uvas que se  tienen en la provincia.

Los datos también indican que hubo caídas en la extensión de viñedos en Río Negro y Córdoba, pero su extensión no impacta sobre el total producido a nivel país.

Por otro lado, al contrario de lo que ocurrió en las dos principales provincias vitícolas, la Rioja incrementó su superficie el 5.1% y Salta el 42.7% lo que los convierte en el tercero y cuarto productor de vinos en el país. También hay otros incrementos como en Chubut y Jujuy pero el volumen producido y cultivado no impacta sobre el total del universo estudiado.

La disminución y el impacto en San Juan

Cuando se puntualiza en el informe del INV, al justificar la disminución de lo cultivado expresan que la tendencia indica que las propiedades son cada vez más grandes y por ende mayor concentración en la producción. El tamaño medio del viñedo en el año 1990 era de 5,1 ha, en el año 2000 de 7,6 ha, en el año 2010 de 9 ha y en el año 2022 de 9,2 ha. 

Si se profundiza se observa que San Juan tiene en la actualidad hay 4478 viñedos. Tiene que marcase que desde el 2010 a la fecha se perdieron 751 viñedos menos.

Pero la crisis se acentúa cuando se hace la comparación entre el 2022 y el  2021. De esto se desprende que en solo un año se perdieron 2315 hectáreas y un total de 105 viñedos. Esta caída sin dudas se atribuye a los efectos de la sequía que impacto sobre los campos. 

Cuando el análisis se profundiza, la ruralidad  y los campos productivos han perdido terreno a raíz de una mala planificación urbana que le ganó a las zonas productivas. 

Sumado a esto, está el problema de la rentabilidad entendiendo que San Juan en su diversificación productiva tiene como principal varietal a la uva Cereza con el 24.5% del total cultivado. Este tipo de uvas tiene como destino la producción de mostos o vinos comunes, le sigue la Flame Seedless con el 11.5% del total, uva que tiene como destino el consumo en fresco. Los varietales para elaborar vinos de alta gama recién comienzan en el tercer lugar con el Malbec y solo el 6.9% de la superficie cultivada en la provincia.

Si comparamos la actual situación con lo registrado en 2010, se observa que la mayor disminución de superficie se produce en las variedades aptas para elaboración, las que han disminuido un 14,3% (-4.843 ha), mientras que las aptas para consumo en fresco y/o pasas han reducido su superficie en un 4,5% (-571 ha).

Si se compara con Mendoza las variedades más cultivadas son para la elaboración de vinos de alta gama como el Malbec y el Bonarda con el 26.8% y el 10% respectivamente. En tercero y cuarto lugar están la Cereza y la Criolla Grande.